Se trata del tratamiento conocido también como maquillaje semipermanente. La micropigmentación es el resultado de la evolución y perfeccionamiento de la dermopigmentación y el maquillaje. Esta técnica se ha extendido para mejorar:
– la apariencia estética de las cejas, simulando pelos para corregir la forma o hacerlas más espesas;
– los labios, para realzarlos y corregir su aspecto.
– la línea de los ojos, para dar más vida a la mirada ensalzando su tamaño y forma;
– y para simular pecas y lunares.
Además de solucionar problemas estéticos, la micropigmentación es conveniente para personas activas que buscan maquillajes que no se alteren con prácticas deportivas tales como la natación, o para ahorrar tiempo.
Otra de las utilidades de este método es la micropigmentación reparadora. Esta aplicación ayuda a recuperar el aspecto de la areola con cicatrices posquirúrgicas o tras una reconstrucción mamaria. También se utiliza para corregir de la forma más natural posible malformaciones de labios, cejas y ojos, camuflar alopecias parciales y/o totale del cuero cabelludo y, sólo en casos específicos y bajo control médico, se puede camuflar un vitíligo localizado.