La comida cubana es el producto de la fusión de la cultura gastronómica aborigen, con las procedentes de España y del continente africano.
El resultado no podia ser menos que delicioso.
Los diferentes platos se sirven al unísono, consiguiendo con su combinación un sorprendente equilibrio. Es como nuestra música, enriquecida por la misma mezcla, que combina sabiamente el sonido de los diferentes instrumentos para conseguir ese ritmo y alegria que la caracteriza.
Esa armonía es el fundamento de la personalidad del cubano.
